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Cómo combaten el fraude las apps de citas
Las apps de citas se han vuelto cada vez más populares en todo el mundo. Sin embargo, como con cualquier sitio web o plataforma en línea, existe la posibilidad de que se produzcan fraudes y estafas.
E
n un esfuerzo por combatir estas actividades, fruto de grietas en el sistema y de la mala fe de algunos usuarios, muchas de estas apps han comenzado a emplear tecnologías de verificación de la identidad y a reforzar sus protocolos.
En los últimos años, ha aumentado muchísimo la popularidad de las aplicaciones de citas. La conveniencia y facilidad de uso que brindan estas aplicaciones permite a las personas conectarse entre sí en cualquier parte del mundo con solo unos pocos clics.
En 2022 el número de personas usuarias de estas aplicaciones superó los 400 millones, según datos recogidos por Statista. Solo de Tinder, la más utilizada, se realizaron 78 millones de descargas en 2021.
Lamentablemente, esta relevante accesibilidad también ha permitido que los estafadores y delincuentes se aprovechen de usuarios desprevenidos. Muchas de estas estafas en línea están volviéndose cada vez más sofisticadas, lo que hace que incluso los usuarios experimentados tengan dificultades para identificarlas antes de que se conviertan en víctimas. Descubrir y denunciar estafas en las apps de citas puede ser una tarea compleja. El celo sobre la vida privada y la vergüenza son factores que a menudo obstaculizan su detección, hasta el punto de que un alto porcentaje de los fraudes nunca llega a salir a la luz.
Las medidas que se han de tomar para atajar estos delitos deben caminar en una doble dirección. Por una parte, los usuarios, apelando a su prudencia, tendrían que ser los primeros en velar por su seguridad. Al igual que tomamos precauciones en otras relaciones digitales como los correos electrónicos o las aplicaciones de mensajería instantánea, debemos tomarlas con este tipo de apps, a pesar de su carácter relajado y emocional. Entre los consejos que dan los expertos y las propias guías de las plataformas, están:
- No compartir información privada, como detalles de contacto o direcciones, o financiera y, por supuesto, tener cuidado si la persona al otro lado nos la solicita aduciendo problemas personales.
- Sospechar si la otra persona no envía fotos o contacta solo en momentos específicos.
- Rastrear su huella digital antes de quedar en persona por primera vez. Por ejemplo, buscar su perfil en redes sociales o descargar sus fotos y cruzarlas a través de un buscador de imágenes específico para detectar si son robadas.
- Preguntar sin temor si se encuentra una inconsistencia en su perfil o a lo largo de las conversaciones.
- Denunciar posibles perfiles fraudulentos a través de los canales que provea la plataforma.
En segundo lugar, las propias compañías tienen el deber de proteger a los miembros de su comunidad y responsabilizarse de su protección. Al tomar un enfoque proactivo para combatir estos problemas, las empresas de aplicaciones de citas pueden asegurarse de que sus plataformas sigan siendo seguras. Esto no solo beneficiará a los usuarios de las aplicaciones, sino que también presentará una oportunidad para que las propias empresas construyan una reputación más sólida en el espacio de las citas en línea. Algunas de ellas ya han tomado algunas medidas, como la introducción de sistemas de onboarding y la identificación de cuentas sospechosas.
Las aplicaciones incorporan algoritmos que detectan y marcan perfiles y comportamientos sospechosos. Por ejemplo, si un usuario intenta acceder a múltiples cuentas en rápida sucesión o manipula los campos de datos para evitar los controles de seguridad, el algoritmo alertará a los moderadores de la aplicación y bloqueará la cuenta antes de que se produzca algún daño.
Además, al analizar perfiles de usuario y conversaciones en busca de frases clave comúnmente utilizadas por los estafadores, las empresas pueden identificar con rapidez cualquier actividad malintencionada en sus plataformas.
El uso del análisis de patrones para detectar perfiles falsos en aplicaciones de citas es otra técnica efectiva. Este análisis implica el examen de varias características, como fotos de perfil, actividad del usuario e interacciones con otros usuarios, para determinar si un perfil es real o no. Por ejemplo, si un perfil solo contiene una foto y no tiene interacción con otros usuarios a pesar de estar activo durante algún tiempo, esto podría considerarse sospechoso.
Otro método utilizado para combatir el fraude son los sistemas de puntuación de confianza. Los usuarios pueden ganar o perder puntos de confianza según su comportamiento en la app. Si un usuario recibe muchas quejas de otros usuarios, su puntuación de confianza puede disminuir.
Además de estos métodos, muchas apps de citas tienen políticas claras y estrictas en cuanto a su uso, y tienen equipos de soporte al cliente que responden a los informes de comportamiento sospechoso o actividad fraudulenta. Según Tinder, su equipo cuenta con especialistas altamente capacitados que utilizan una red de tecnología de vanguardia para analizar y detectar los fraudes. Realizan un análisis detallado del perfil de todos los miembros en busca de posibles indicios de fraude en el lenguaje utilizado, además de llevar a cabo revisiones manuales de perfiles y actividades sospechosas, así como de los informes generados por otros usuarios.
Si se producen repetidas denuncias a un perfil, las plataformas suelen poner en práctica el shadow banning (hacer que el perfil sea invisible para el resto de los usuarios), rastrear la actividad del sospechoso y, en última instancia, bloquear al usuario.
En general, la combinación de tecnologías de verificación, detección de fraude, moderación de contenido, puntuación de confianza y políticas claras ayudan a las apps de citas a mantener un entorno seguro y protegido. Como siempre, es importante que los usuarios también tomen medidas de precaución al utilizar estas plataformas y denuncien los comportamientos perniciosos.