e-Tazkira: millones de afganos enfrentan obstáculos como largas esperas, costos inalcanzables y desigualdades entre territorios.
Juegos y apuestas online en la UE: un sector, distintas visiones
Si hay una palabra que pueda definir las regulaciones en el campo de las apuestas y los juegos online en la Unión Europea, esa es: “fragmentación”. Cada territorio legisla de una manera diferente, lo que colisiona a veces con las necesidades del consumidor y los intereses del sector.
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a falta de uniformidad en las normativas de apuestas y juegos en línea responde a que estas se establecen de acuerdo a intereses políticos y cambios sociales. La responsabilidad de los Estados ante las formas más adictivas de juego repercute en normas que limitan o modifican modos de uso de muy variadas formas. Además, como cuestión de fondo, está la lucha contra el fraude, en un sector muy llamativo para los ciberdelincuentes, dada la gran cantidad de dinero que genera. Según un estudio reciente, la industria moverá 172.230 millones de dólares en 2030, frente a los 60.480 millones de dólares de 2020, con una tasa interanual del 11,03% en el segmento 2021/2030.
Proteger e informar
Una muestra de estos cambios a los que nos referimos es el nuevo decreto impulsado por el Ministerio de Consumo de España, que entrará en vigor en septiembre de 2023. En él, se insta a las casas de apuestas en línea a generar un mensaje explicativo cada hora a los usuarios de estos servicios en los que se informe del dinero apostado y de las pérdidas ocasionadas. No es la única medida que se pondrá en marcha. El decreto también marca que se deberá enviar un informe mensual al jugador y mensajes diferenciados en los que se indiquen, si procede, pérdidas superiores a los 600 euros durante 3 semanas seguidas; 200 euros en el caso de los menores de 25 años. El decreto trata de promover pautas saludables y “minimizar los comportamientos de juego de riesgo o intensivo que pueden derivar, en los casos más extremos, en conductas problemáticas o patológicas”.
Matices territoriales: Chipre, Italia, Alemania y Suecia
Es solo un ejemplo de hacia dónde se está moviendo a ley en la actualidad. Si echamos una mirada a Europa, nos encontramos con que la autonomía de cada Estado moldea la forma en la que estas prácticas llegan a la ciudadanía. La mayor parte de las reglas hacen referencia a los límites por edad, aunque también a los tipos de juego a los que se puede acceder o, como hemos visto en el caso de España, los protocolos que se han de activar para corregir las consecuencias de los hábitos adictivos.
- Chipre: Los juegos y apuestas son gestionados por el Estado hasta cierto límite y, aunque la publicidad está autorizada, esta solo debe emitirse dentro de horarios concretos y nunca puede dirigirse a menores de 21 años. Ciertas actividades como las apuestas con criptomoneda o una forma de juego especulativo conocida como spread betting, están completamente prohibidas.
- Italia: A pesar de tener históricamente uno de los marcos regulatorios más liberales de Europa, en 2018 estableció la prohibición total de publicidad de juegos y apuestas. En agosto de 2022 multó a Google con 1,5 millones de euros por violar este decreto, en lo que fue la primera gran sanción para una tecnológica por esta razón en el país.
- Alemania: Con el juego online prohibido hasta 2021, en aquel año entró en vigor la normativa que por fin lo hacía posible, pero con fuertes restricciones. Los alemanes tienen límites mensuales para apostar que rondan los 1000 euros, los proveedores deben obtener una licencia que caduca a los cinco años y la publicidad está prohibida entre las 6 AM y las 9 PM.
- Suecia: Durante muchos años, la empresa estatal Svenska Spel fue la única autorizada a ofrecer juegos de azar en Suecia. En la actualidad, los casinos físicos siguen perteneciendo a Svenska Spel, si bien el juego online ha abierto la puerta a la gestión privada. A principios de 2022, de manera similar a Alemania, estableció límites de apuestas y también de pérdidas diarios, semanales y mensuales.
Para los proveedores, mantenerse al día en mitad de este maremágnum legislativo tiene consecuencias; desde pérdida de tiempo o pobre experiencia de usuario (de ahí las altas tasas de abandono en el onboarding en plataformas de juego online) hasta prácticas irresponsables por desconocimiento que pueden resultar en brechas de seguridad. Es indispensable cerciorarse de que el proveedor de los juegos está contrastado y es legal, puesto que los criminales llegan a crear plataformas ficticias con el único objetivo de robar fondos, suplantar identidades o blanquear dinero.
Importantes consecuencias económicas
A mediados del año pasado, el conocido operador de apuestas online LeoVegas se enfrentó a una multa de 1’32 millones de libras (más de 1 millón y medio de euros) por fallos en sus protocolos anti-blanqueo y de responsabilidad social. La resolución refleja un comportamiento que daba la espalda a las recomendaciones dictadas por Europa referentes a límites en el tiempo de juego. Según la sentencia, el operador establecía normas aleatorias que no respondían a un interés real de protección. Por ejemplo, generaba mensajes tras 6 horas de actividad del mismo usuario recomendando un descanso de 45 minutos, pero este aviso no se basaba en ninguna guía oficial. Las auditorías realizadas también destaparon huecos y decisiones “poco realistas” en su lucha contra el fraude y el lavado de dinero.
Sin un estrecho compromiso por parte de los operadores de juego y la generalización de proveedores de tecnología que garanticen sólidos procesos de verificación de la identidad, los consumidores seguirán padeciendo las consecuencias de un marco regulatorio tan dividido.