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El auge del Legal Tech revoluciona la práctica jurídica

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El auge del Legal Tech revoluciona la práctica jurídica

El crecimiento potencial del sector legal tech haría posible un salto definitivo en la práctica jurídica que exigiría de cambios legislativos y de un cambio de perspectiva, incluyendo las posibilidades de la video verificación o la biometría para la apertura de procesos. 

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uando hablamos de legal tech, nos referimos a dos grandes grupos de recursos tecnológicos. El primero de ellos comprendería todos aquellos servicios que facilitan las gestiones de los usuarios, reduciendo o eliminando la necesidad de recurrir a un abogado de la manera tradicional. El segundo gran grupo englobaría todas las herramientas que utilizan los propios abogados para reducir costes, ahorrar tiempo y, en definitiva, facilitar los procesos legales.  

Según estudios recientes, un 80% de los profesionales legales dará prioridad a la aplicación de tecnología que facilite sus procesos de aquí a 2024. Esta expansión del legal tech significa facilitar la vida de los ciudadanos y aligerar las farragosas tareas de los despachos. Y es que uno de los problemas tradicionales de abogados y servicios jurídicos es la enorme cantidad de tiempo que pierden en tareas de comprobación de estado o análisis de documentos. 

La adopción de tecnologías de vídeo identificación está revolucionando también los procesos de onboarding de nuevos clientes en el ámbito legal. Estas herramientas permiten a los profesionales legales verificar rápidamente la identidad de los usuarios y agilizar el proceso de apertura de cuentas y cumplimiento de los requisitos KYC. 

Múltiples aplicaciones 

Estas soluciones tecnológicas están revolucionando el ejercicio del Derecho en todo el mundo y de múltiples maneras. Existen plataformas de investigación legal en línea que proporcionan acceso una amplia variedad de fuentes legales, incluyendo casos, estatutos, reglamentos y otras publicaciones jurídicas. Otras soluciones se orientan a la automatización de procesos y a establecer y mejorar los flujos de trabajo. Por supuesto, son parte de las tecnologías aplicadas al sector jurídico las soluciones de firma electrónica, las de análisis, organización y envío de documentos, que ahorran tiempo y papel, autoidentificación, identificación en video, análisis KYC o gestión de clientes y facturación. Y no podemos ignorar el auge de las herramientas basadas en Inteligencia Artificial que, aplicadas a este sector, ayudan a llevar a cabo investigaciones más rápidas, predecir resultados de casos, transcribir automáticamente o revisar grandes cantidades de documentación. 

Desde TrustCloud se articula una propuesta tecnológica con soluciones que facilitan la actividad legal integralmente, con especial énfasis en la identificación digital. 

  • VideoID. Con la posibilidad de ser atendido por un agente o de manera automática, la video identificación de TrustCloud se distingue por su agilidad y su solidez en términos de compliance.
  • AICR. Sumando Inteligencia Artificial al reconocimiento óptico de caracteres, AICR permite la extracción de datos y palabras clave, la búsqueda de información relacionada en la nube y la transformación de documentos en atributos de identidad.
  • Firma. Gestiona los procesos de firma electrónica y los combina con cualquier otra transacción digital.
  • Custodia. La custodia blindada de activos digitales es básica en el ámbito legal. Construye confianza y garantiza el pleno control sobre sus intereses por parte del cliente. 

Dentro de una asesoría o un despacho de abogados, todas estas soluciones son de gran utilidad para identificar clientes, agilizar procesos y forjar relaciones desde el primer momento. 

Expansión 

La adopción de tecnología legal tech está en plena aceleración y está previsto que el mercado, cuyas aplicaciones, como hemos visto, son muy diversas, alcance a nivel mundial los 25’5 mil millones de dólares en 2025, lo que significa una tasa de crecimiento anual del 22% en un lustro (2020 – 2025). La legal tech está cambiando rápidamente la forma en que se realizan las actividades legales, y se espera que esta tendencia continúe a medida que se desarrollen nuevas tecnologías y se adopten nuevas formas de trabajar. Esta forma de entender el ejercicio de la abogacía y la asesoría jurídica, más flexible y adaptada a los nuevos tiempos, da lugar a nuevos modelos de negocio, como los servicios legales basados en suscripción. Permite, además, una mayor transparencia y accesibilidad en el sistema legal, lo que beneficia tanto a los abogados como a los clientes. 

Problemas sin resolver 

Sin embargo, todavía muchos departamentos legales y despachos de abogados ignoran lo que el legal tech puede hacer por ellos y no instalan la tecnología más avanzada o adecuada a su perfil. Iniciativas como Dutch Legal Tech en Países Bajos son un ejemplo de estrategia para impulsar estos sistemas a nivel nacional. No por casualidad ostenta este país europeo el segundo puesto en el ranking que marca el índice Global de Innovación, solo por detrás de Reino Unido. Dutch Legal Tech es una organización de apoyo a empresas con más de 1200 miembros, que organiza eventos o sesiones de formación para acelerar la innovación legal. Estos proyectos nacen para combatir los principales escoyos a los que se enfrenta la evolución en legal tech. Según el informe Hype Cycle for Legal and Compliance Technologies de 2022 de Gartner, las principales razones por las que la inversión en este sector es insuficiente son: 

  • Falta de entendimiento y conocimiento de la propia tecnología por parte de los profesionales. 
  • Formación insuficiente, que impide leer las ventajas que aportaría la adopción de estas tecnologías. 
  • Falta de recursos. Según los datos que maneja Gartner, un 58% de los servicios jurídicos no tiene una partida específica y/o suficiente para legal tech. Por otra parte, otro estudio publicado por Deloitte arroja un interesante 62% de empresas que tienen previsto aumentar su presupuesto en legal tech a corto plazo.  

La orquestación y la coreografía de microservicios sería una interesante vía para corregir carencias de este tipo. También para depositar la carga de tareas como la verificación documental o las comprobaciones KYC y KYB en manos expertas. Para ello, TrustCloud ha desarrollado el primer coreógrafo transaccional del mundo, capaz de operar con grandes volúmenes de trabajo. 

Margen de mejora 

Los abogados actuales deben apostar por una formación continua, ya que se mueven en un entorno muy competitivo, en el que se les exige rapidez y especialización. Para perfeccionar el campo legal tech es necesario que haya una mayor colaboración entre los desarrolladores, los bufetes de abogados y los departamentos jurídicos corporativos, de manera que se establezcan estándares y mejores prácticas para la adopción y uso de tecnología legal. Enfocarse en la usabilidad de las herramientas de autoidentificación, que provean de un onboarding cercano, permitiendo que estas puedan ser utilizadas por abogados y otros profesionales legales sin necesidad de una formación especializada, también podría ser un paso definitorio de la penetración del legal tech a nivel global. La tecnología legal también debe ser desarrollada teniendo en cuenta los aspectos éticos y de responsabilidad. Esto implica asegurar que los algoritmos y sistemas de inteligencia artificial sean transparentes y justos, y que se eviten sesgos y discriminación. Además, la educación legal debe incorporar en sus planes de estudio las últimas innovaciones para que los futuros profesionales del derecho estén mejor preparados para utilizar y adoptar tecnología legal.  

Como es obvio, las empresas de legal tech deben asegurar que sus productos y servicios cumplan con los más altos estándares de seguridad y privacidad y estar dispuestas a adaptarse a los cambios y necesidades del mercado, construyendo soluciones que respondan a las demandas de los usuarios y a los nuevos desafíos. 

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