El smurfing en los videojuegos es una práctica antideportiva y es difícil de detectar, pero se combate mediante verificación de identidad digital o machine learning.
Onboarding de empleados. Soluciones que se adaptan a los nuevos panoramas laborales
El trabajo en remoto se ha ido expandiendo y adoptando nuevas formas poco a poco, con un impulso mayúsculo a partir de 2020. Llevar a cabo un onboarding de empleados efectivo y permeable a los cambios se hace indispensable en un planeta digitalizado y global.
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a fisonomía de la mayoría de los sectores ha sufrido cambios en uno u otro sentido, auspiciados por las posibilidades del trabajo en remoto o en modalidad híbrida. Las oficinas se vaciaron y todos los procesos se impregnaron de pantallas y aplicaciones de colaboración en línea. El perfeccionamiento de los recursos tecnológicos y los nuevos enfoques de las empresas hacia la relación con los empleados y la productividad también han sido factores esenciales en estos cambios, que han permitido a las firmas contratar a trabajadores de todo el mundo y a los trabajadores tener más flexibilidad y autonomía. Las compañías han entendido que ofrecer la posibilidad de trabajar desde cualquier ubicación es también una forma de retener talento.
Nuevos espacios, nuevas dinámicas, nuevas formas de entender el onboarding de un nuevo miembro del equipo
La creatividad ha hecho aflorar nuevas formas de relación laboral más allá de la oficina como, por ejemplo, los espacios de coworking: lugares donde profesionales independientes, emprendedores y pequeñas empresas pueden trabajar juntos en un ambiente colaborativo y compartido. Unidos al concepto de flexibilidad, los espacios de coworking no entienden de rígidos horarios y son un lugar de encuentro para optimizar recursos, pero también para que trabajadores de ámbitos comunes puedan colaborar y compartir ideas mientras mantienen su independencia.
En este panorama de adaptación constante, las entrevistas de trabajo también han tenido que saber evolucionar para ser más precisas, humanas y seguras. La entrevista se ha convertido en todo un ejercicio de conocimiento en una doble dirección que rebasa los límites del simple cuestionario sobre la experiencia previa y la formación académica. Hay un mayor enfoque hacia las habilidades comunicativas y de resolución de conflictos del aspirante y se busca que este encaje en la cultura de empresa, alineándose con sus objetivos y valores.
Procesos perjudicados por el fraude
Obviamente, los recursos en remoto también han impregnado los procesos de selección y los fraudes en las entrevistas de trabajo se han vuelto cada vez más comunes. Uno de los fraudes más comunes es la suplantación de identidad, que puede ser muy difícil de detectar especialmente en entrevistas virtuales. Los impostores llegan a utilizar falsos documentos de identificación y deepfakes o incluso a crear perfiles falsos en las redes sociales para aparentar ser otra persona. Además, pueden utilizar técnicas de ingeniería social para persuadir a los empleadores de que son la persona adecuada para el trabajo. El problema de la suplantación de identidad es que acarrea consecuencias muy graves para los empleadores y para los verdaderos solicitantes de empleo. Los empleadores pueden contratar a un impostor en lugar de a un candidato cualificado, lo que implica una pérdida segura de tiempo y dinero. Además, los verdaderos solicitantes de empleo pueden perder la oportunidad de conseguir un trabajo debido a la competencia de un impostor. Para evitar estos fraudes, es importante que los empleadores tomen medidas de seguridad adecuadas durante el proceso de entrevistas con el objeto de verificar la identidad del entrevistado y asegurarse de que están contratando a la persona correcta.
Construir una identidad completamente ficticia o combinando rasgos reales de diferentes personas con atributos inventados (lo que se conoce como identidad sintética) para lograr un empleo puede parecer extremo, es una táctica habitual. En los últimos años se ha extendido una nueva forma de estafa que consiste en reclutar a alguien que haga el trabajo sucio de la suplantación, para que luego la persona “real” se presente en el puesto correspondiente. Es lo que se conoce como bait and switch (algo así como ‘cebo y cambio’), un término muy conocido en el campo de las ventas y el marketing y que hace referencia a estratagemas en los que se ofrece un producto gancho con muy buenas condiciones que no existe o que nunca se llega a vender realmente, con el objetivo de “atrapar” a un cliente.
Un proceso KYC acorazado
Así pues, el momento en el que el trabajador se muestre antes sus compañeros físicamente puede alargarse o incluso no producirse nunca, generándose situaciones de peligro. Para evitarlas, las empresas han de afianzar sus protocolos de seguridad, realizar verificaciones de antecedentes y referencias de los candidatos, reconfirmar la validez de la documentación oficial para verificar la identidad de estos, reforzar los procesos con entrevistas telefónicas o por videollamada o actividades presenciales individuales o en grupo y, obviamente, utilizar software de verificación de identidad. Afortunadamente, hoy en día existe mayor conciencia de las consecuencias de un ataque o suplantación y de la importancia de mantener las soluciones informáticas actualizadas y de adoptar férreos controles en el campo del Know your customer (Conozca a su cliente, KYC).
TrustCloud blinda el proceso de verificación de identidad de nuevos trabajadores y garantiza a sus clientes que la persona que está a punto de incorporarse al equipo es quien dice ser y, por supuesto, que se trata de la misma persona que participó en el proceso de selección y fue elegida.
TrustCloud ofrece a empresas y entidades diversas modalidades y capas de seguridad. Gracias a sus soluciones de KYC con las que se monitoriza la identidad del nuevo trabajador y la suma de video identificación con validación documental, bioidentificación y firma electrónica, los clientes pueden confiar en que la persona que está completando su proceso de onboarding es la correcta. TrustCloud trabaja para que aquellas personas que quieren suplantar la identidad de alguien o enmascarar datos de su trayectoria no tengan la más mínima oportunidad de conseguirlo.
La verificación de la identidad en el caso de nuevos trabajadores adquiere un gran valor estratégico, siendo base de la relación contractual entre entidades y empleados.
TrustCloud despeja en instantes cualquier duda sobre la identidad de los nuevos fichajes y certifica la veracidad de la información aportada por los candidatos.